El verano islandés se disfruta más porque es más corto y por ello más intenso. La época estival es la idónea para dirigirnos al norte, visitar los Fiordos del Oeste y encaminarnos hacia la fachada islandesa del Océano Glaciar Ártico. Aprovechemos que las carreteras están libres de hielo y que el buen tiempo es más habitual que el malo. Recorramos Islandia con su verano como compañero de viaje.
El gran norte islandés.
Akureyri, la capital del norte es la segunda ciudad de Islandia, con amplia dedicación a la pesca, pero también al turismo. Desde Akureyri se pueden realizar excursiones marítimas en busca del avistamiento soñado de ballenas o las colonias de frailecillos. Todo en pequeños pero robustos barcos islandeses de bajura, muchos con una larga historia de pesca en sus calas y rehabilitados para el turismo responsable (más información escríbannos a (info@guiadeislancia.es).
Akureyri es una animada ciudad en esta época del año, con bares, restaurantes, hoteles y muchos conciertos y actuaciones en sus pubs. Infórmese por si durante su viaje tiene lugar algún festival de música, por ejemplo.
La Ruta del Diamante.
Pero nuestro viaje continúa hacia el este por la Ring Road, la carretera número 1. Después de abandonar Akureyri a una hora y cuarto se encuentra el bonito puerto de Husavik, la otra gran ciudad del norte. Por gran ciudad entiéndase ciudad modesta en tamaño y población, pero de gran interés y centro neurálgico de la mayor parte de sitios que se pueden visitar en la Ruta del Diamante.
Además de los servicios y la animación de la ciudad, desde Husavik en 50 minutos estaremos disfrutando del espectacular Cañón de Ásbyrgi, muy cerca de la costa y que en sus tres kilómetros de longitud nos llena de imágenes espectaculares y paisajes de ensueño. La ruta del cañón se puede hacer en bici también.
El cañón de Ásbyrgi crea un ecosistema particular donde abunda el agua y crecen los arboles y las flores, dando a todo el sitio un aura idílica (Ver foto de cabecera). Sigur Ros, el conocido grupo islandés dio en 2006 un concierto memorable en mismo el fondo del cañón.
Pero de ensueño son los Castillos Oscuros y los Acantilados de los Murmullos, curiosas formaciones volcánicas que recuerdan pasajes del libro de Michael Ende La Historia Interminable, o geodas gigantes vaciadas de su contenido y dobladas por fuerzas gigantescas.
El lago del cráter Viti en el Parque Nacional de Vatnajökull (inmenso espacio protegido que ocupa buena parte del oriente islandés) es un lugar mágico para fotógrafos y amantes de los contrastes. Sus tonos turquesas parecerían llevarnos al caribe o a alguna idílica playa, pero no estamos en la idílica y telúrica Islandia.
El complejo volcánico del Askja nos lo recuerda, y también las cascadas, fruto de la fuerza de la tierra que ha doblado, roto, desmenuzado la corteza terrestre islandesa, al crearla, al modelarla y al dejarla ahí para que contemplemos su formidable poder.
Las cascadas de Eiderfoss y Godafoss no hacen sombra al inmenso poder de la cascada de Dettifoss, la más caudalosa de Europa, pero completarán nuestra colección de saltos de agua islandeses.
Por último el lago de Myvatn, a 40 minutos al sur de Husavik completa un viaje del que sólo hemos desmenuzado los sitios más conocidos y populares. Sin embargo, toda la región es un paraje a descubrir y a conocer, por lo que no duden en encontrar nuevos lugares, nuevos recodos, donde su viaje por Islandia se haga, el sólo, único.
Para más información visiten la página de la Ruta del Círculo de Diamante o escribánnos a: info@guiadeislandia.es
